En una primera sesión, los padres exponen el motivo de consulta y nuestra psicóloga valorará la necesidad de evaluar al niño y empezar un tratamiento. Este tratamiento puede hacerse solo con el niño o conjuntamente con los padres y el niño.
Lo motivos por los que puede ser necesario acudir al psicólogo pueden ser varios:
- Aparecen conductas que provocan una alteración en el ámbito familiar.
- Cambios o dificultades en las relaciones o dinámicas familiares.
- Problemas de comportamiento en el colegio o instituto.
- Problemas físicos sin una causa médica.
- Cambios repentinos en el niño/a sin causa aparente.